El piloto de Niviuk Vicente Palmero colabora desde hace años con el Proyecto Juntos –una asociación española que mejora la calidad de vida de los niños hospitalizados y sus familias–, ofreciendo vuelos tándem de paramotor a los más pequeños.
Una de las iniciativas de la organización se llama “El descanso del guerrero” y está dedicada a invitar a varias familias con menores hospitalizados de larga duración a pasar cinco días en Ibiza y cambiar sus camas de hospital por un entorno lúdico. Los pequeños, sus padres y hermanos, recargan pilas en la isla disfrutando de unas merecidas vacaciones.
El proyecto es parte de una terapia donde se les intenta llenar de recuerdos positivos, ofreciendo momentos de relax y distracción a través del humor y la fantasía. Y también a través de sensaciones nuevas, ya que una de las experiencias proporcionadas es poder disfrutar de un vuelo por toda la isla a bordo del R-Bus 2.
“Cuando el fundador, Carlos Ramón, me explicó el proyecto, no dudé en poner a disposición todas mis herramientas de trabajo y mi experiencia para que criaturas, padres y hermanos pudieran disfrutar de un vuelo en un lugar tan bonito como Ibiza”, explica Vicente.
“Es muy gratificante y reconfortador ver las sonrisas, sentir sus abrazos y poder contribuir a que se lleven un buen recuerdo de estos días de descanso. Esta ha sido la sexta edición y espero que vengan muchas más”, dice Vicente, esperando repetirlo de nuevo el año que viene.
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